Fantasías

Alguna vez has querido volar, para tocar las nubes. Seguro. Todos lo hacemos. Todos tenemos esa sensación de hambre al ver las nubes blancas, algodonosas. Prácticamente todo el mundo se ha quedado en estado de hipnosis mirando a las nubes. Pensando en lo bonito que sería viajar en un aeroplano, tocando las nubes con los dedos, viajando a las estrellas. Haciendo lo imposible: tocar el cielo.Hablamos de sentimientos, no de razón. De aquello que nos mueve por dentro, más allá de lo que podemos ver. Es lo que podemos encontrar. La nada. La nada simplemente. En eso reside la belleza. En nada y en todo a la vez. En saber apreciar los detalles de lo ínfimo. En aprovechar cada minúsculo centímetro para lo mejor. Aprovechar cada día, cada hora, cada verso. Para viajar al paraíso o…
Quizá…A una playa sin cometas